De la mano de la defensa de las experiencias autonómicas de los pueblos indígenas, de la resistencia a la escalada represiva que de suyo significará la estrategia contrainsurgente, de las reflexiones, discusiones y acuerdos sobre el carácter de la Otra campaña y la Zezta Internacional y del fortalecer las pequeñas luchas que sostienen dignamente nuestros pueblos, organizaciones y colectivos, será fundamental para el año que comienza consolidar la red de medios alternativos de comunic@cción que sirven de resonadores a la palabra que abajo y a la izquierda, desde Tijuana hasta La Realidad y en los cinco continentes del planeta, camina nuestro andar contra el Capitalismo y el Neoliberalismo. 2007 se caracterizó por ser un año donde la libertad de expresión ha sido limitada a extremos criminales a dos manos: entre la censura y autocensura establecida por los dueños de los medios corporativos de comunicación, y el asesinato de periodistas en la lógica del narcotráfico; ambas son producto del Capitalismo.
Y es que 2008 bien puede ser al año en el que el Capital y sus testaferros intentarán hacer todo lo posible política, social, económica, cultural y militarmente para sostenerse ante las crisis que desde todos los ámbitos este año les amenaza. Así, el trabajo desde los medios alternativos dará cuenta no sólo de que el Capitalismo, cadáver insepulto que no termina de pasarse de vivo, no estará derrotado por las propias contradicciones en sus entrañas y que precisa de nuestra ayuda organizándonos para golpear la propiedad privada de los medios de producción y de cambio; sino difundiendo por los siete puntos cardinales que no hay un solo rincón del planeta con hombres y mujeres que no se estén organizando ya para el funeral, intercambiando experiencias y herramientas heredadas de nuestras largas tradiciones de resistencia, dispuestas, dispuestos, para pasar a la ofensiva.
Ésta ofensiva, ante un porvenir inmediato que pinta cual cielo cargado de oscuras nubes que anuncian tormenta, tendrá que juntar a la Otra comunicación, que dará voz a la palabra nuestra, los trabajos de la Otra cultura y la Otra educación articulando planes individuales, familiares, grupales, colectivos, comunitarios y populares para darle flor y canto a nuestro sentir, nuestro pensar y nuestro actuar. 2008 puede ser entonces también el año en que tendamos puentes entre trabajadoras y trabajadores del arte y la cultura que han suscrito la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, en aras de organizar no sólo eventos propagandísticos, sino también procesos educativos para que la música, la danza, el teatro, la literatura o la pintura se vuelvan, como dijera Gabriel Celaya, armas cargadas de futuro, y “tomar partido hasta mancharse”.
La cultura, como la política, es un patrimonio de todas, de todos; pero así como el Capitalismo se ha adueñado de los medios de producción, de la misma manera nos ha dicho una y otra vez que sólo unos cuantos pueden hacer política y otros, también unos cuantos, cultura. Pero creando espacios fraternos y sororos para la construcción de conocimiento abajo y a la izquierda, siendo todas y todos maestras, maestros, siendo todos y todas alumnos, alumnas, además de conocer los modos de sentir y pensar del otro, de la otra, de sus modos de hacer arte y cultura como pueblo y como persona, a lo mejor también podamos reconocer en nosotras y nosotros mismos modos propios para hacer arte y cultura y reconstruir así el tejido social que el Capitalismo ha roto para tenernos divididas, divididos, sin respetarnos como hombres y mujeres y sin respetar a la naturaleza, que es la vida.
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